Este es el cuento de Caperucita roja representado en una caja de cartón grande. La idea principal es trabajar el cuento de otra manera que no fuese el libro o secuenciación de imágenes, ya que previamente lo habíamos trabajado en el aula. Además con este sistema se hace más visual lo que significa el camino largo y corto (los caminos se ponen rectos para observar mejor la diferencia) que siguen los personajes del cuento. A partir de ahí trabajamos con otras actividades los conceptos de corto-largo.
Por otra parte, también captan más empíricamente los conceptos dentro-fuera, gracias al armario en el que se esconde la abuelita. Como se observa, tanto el escenario como los personajes tienen diferentes texturas para estimular el tacto. A parte de estas peculiaridades se trabajan también las partes de la cara, el color rojo, la moraleja, etc. Es decir, lo típico de este cuento tradicional.
En cuanto a mi experiencia personal, he de decir que a los niños les encantó poder ver y escuchar el cuento de esta manera, pero sobre todo poder contarlo ellos mismos a su manera y jugar con los personajes.
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